¿Una biosfera en el mundo vecino?

 

La exploración de marte que llevan haciendo los científicos desde hace décadas tiene como objetivo averiguar si este mundo vecino fue en el pasado una biosfera. Con naves orbitales (sobretodo de la NASA, pero con la muy importante aportación de la Mars Express), y en la superficie del planeta los científicos han estado buscando, sobre todo, rastros de agua como condición imprescindible, pero no única, para la existencia de la vida. Han encontrado también huellas geológicas que muestran que no siempre fue Marte el planeta árido e inhóspito. Se han descubierto algunas zonas en las que se cree que el agua debía de ser  no solo abundante si no que su presencia sería prolongada. Pero además de agua hace falta una fuente de energía para alimentar el metabolismo microbiano, así como carbono, hidrógeno, azufre, nitrógeno, fósforo y otros elementos.

El Curiosity , un geólogo rodante avanzado se diseñó precisamente para buscar estos ingredientes necesarios. Se han encontrado algunos de ellos en el cráter Gale ( que una vez tuvo un lago que habría sido capaz de soportar una biosfera marciana) pero el Curiosity no fue diseñado para ni optimizado para buscar directamente el rastro.

El rastro de la vida será el objetivo de futuras misiones en el suelo del planeta rojo. Muchos científicos consideran que habrá que esperar un poco más hasta que se traigan muestras de Marte a la Tierra para someterlas a los análisis más avanzados que permitan los laboratorios.

Esta entrada foi publicada en A Ciencia, O universo. Garda o enlace permanente.